DUNEDIN, Florida -- El derecho dominicano
Luis Santos llegó a los Entrenamientos de Primavera como un posible candidato para un puesto en el bullpen de los Azulejos. Pero ahora no está bajo el radar.
Santos continúa siendo uno de los serpentineros que ha sobresalido en los entrenamientos de Toronto. El dirigente John Gibbons y el coach de pitcheo Peter Walker no han dudado en elogiar el trabajo de Santos y con cada presentación el quisqueyano parece estar presentando fuertes argumentos.
El diestro de 27 años de edad no ha concedido ningún imparable ni una carrera en seis episodios. Ha recetado seis ponches y ha otorgado un pasaporte, además de superadar las 90 millas por hora con su recta. Santos llamó la atención de algunos a finales de la campaña pasada cuando se expandieron los rosters y varias personas están muy contentas con su desempeño.
"Primero que todo, tiene un gran brazo", señaló Gibbons. "Ya es un pitcher de Grandes Ligas. Se ha ganado ese derecho y ahora veremos qué puede hacer. Lo que sobresale es que tiene durabilidad y eso no se ve en tantos relevistas. Se recupera un poco más rápido que la mayoría de los otros muchachos".
Pese a su gran actuación en la pretemporada, Santos todavía tiene mucho camino por recorrer para asegurar un puesto en el roster de 25 jugadores. Toronto tiene dos vacantes y una cantidad de relevistas veteranos como alternativas, incluyendo a Tyler Clippard, John Axford, al dominicano
Al Alburquerque y Craig Breslow. Cada uno de ellos, junto a Santos, firmó contratos de liga menor.
Sin embargo, Santos tiene algo a su favor: versatilidad. Los otros cuatro candidatos son prácticamente relevistas de una entrada, mientras que Santos fue abridor en liga menor y podría ser relevo largo. También le sobran opciones de liga menor y si no es agregado en el roster de 40 jugadores, podría bajar a una sucursal si Toronto necesita otro brazo durante la temporada.
"Es un muchacho que podría tirar dos, tres, posiblemente cuatro episodios dependiendo de cuánto descanso tenga", agregó Gibbons. "Es muy bueno. Poncha a bateadores y consigue roletazos. Los equipos siempre buscan brazos porque ahora es un juego de especialistas, la mayoría de un inning. Este es un muchacho que puede hacer más y en varios días seguidos".