¿Qué esperar de Jesús Sánchez en MLB? 

Los Marlins alinearon a siete patrulleros derechos diferentes en los primeros 18 juegos de la temporada y llegaron al viernes con la peor producción (.167/.254/.167) combinada de dicha posición en las Mayores. Sin embargo, aún ocupan un potencial puesto de postemporada y ahora llegan los refuerzos. 

Jesus Sanchez, prospecto número 5 de los Marlins y el número 88 en todo el béisbol, fue activado por Miami el viernes.

Originalmente, Jesus Sanchez firmó con los Rays por US$400,000 en el 2014 y al año siguiente sorprendió bateando .335/.382/.498 en la Liga Dominicana de Verano. Continuó ascendiendo por el sistema de Tampa Bay, ganando el premio de Jugador Más Valioso de su liga en cada una de sus primeras cuatro campañas como profesional y fue titular en el Juego de las Futuras Estrellas SiriusXM en el 2018.

Jugando con una hernia deportiva que requirió de una cirugía en el receso de temporada, Sánchez tuvo los peores números de su carrera (.260/.325/.398) en el 2019, aunque alcanzó el nivel de Triple-A con 21 años. Los Marlins lo adquirieron en julio del 2019 en un cambio que también llevó a Miami a Ryne Stanek, por Nick Anderson y Trevor Richards. 

Ahora, con 22 años, Sánchez es un bateador más puro que los demás patrulleros de los Marlins en las Mayores y si produce lo que proyecta, podría ver acción de manera regular con el equipo. El viernes fue alineado como octavo en el orden al bate ante los Nacionales y se fue de 4-0 con tres ponches. 

Aquí, un resumen de sus herramientas evaluadas en la escala de los scouts de 20 a 80, siendo 50 el promedio en Grandes Ligas. 

Contacto (55): Aunque Sánchez es un diestro natural, batea a la zurda porque cuando estaba aprendiendo a jugar, su hermano mayor quería que emulara a su compatriota David Ortiz. Tiene un swing rápido a la zurda, que lo ha hecho capaz de generar contacto consistentemente con promedio de .296 en cinco temporadas en las menores. Utiliza todo el terreno y se mide bien ante los lanzadores de ambas manos. Se ha ponchado el 18% de sus veces al bate y sólo ha negociado boletos en un 6%, pero demostró más paciencia en Doble-A y Triple-A. 

Poder (55): Sánchez nunca ha sacudido más de 15 jonrones en una temporada como profesional, pero tiene la velocidad en el bate, el poder y la corpulencia de 6-pies-3 (1.92 metros) y 222 libras (100.6 kilogramos) para conectar 25 al año. Ha mejorado la selección de pitcheos en los niveles más altos y ha empezado a batear la bola por el aire con más frecuencia, aunque sigue conectando muchos rodados.

Velocidad (50): El dominicano tiene una velocidad promedio, pero no es una amenaza en las bases. Ha sumado 29 robos en 65 intentos (64% de éxito) en 464 juegos como profesional. 

Brazo (55): El brazo de Sánchez generó buenas calificaciones de los scouts y se acomoda perfectamente en el jardín derecho. Registró 39 asistencias en 421 juegos en los jardines, incluyendo 10 en 103 encuentros del año pasado. 

Defensa (55): Aunque Sánchez jugó principalmente en la pradera central en sus primeras dos campañas como profesional y volvió a ver acción ahí luego del canje del año pasado, se adapta mejor a las esquinas. Tiene la velocidad y los instintos para ser un sólido defensor. Está por verse si podrá moverse al jardín izquierdo cuando el seleccionado en el cuarto lugar del Draft amateur del 2019, J.J. Bleday, esté listo para las Mayores.